…a los traidores que sembraron tanta muerte…



«Una guerra, dijo Dukheim, es una orgía de violencia en la que muchos dan rienda suelta a su desesperación. Cuando el Estado prácticamente desparece y las normas éticas se invierten – es decir, que quien delata y mata, por ejemplo, puede ser ascendido y condecorado-, muchos ciudadanos muestran su lado oscuro y su violencia interna. En cualquier caso, una guerra no sólo se hace con unos cuantos criminales. Hace falta la complicidad o el silencio de toda una sociedad»

Es del prólogo que hace Isabel Nuñez en el libro de Slavenka Drakulic: No matarían ni una mosca. Criminales de guerra en el banquillo.

Hace mucho tiempo que tenía pendiente este libro, que hace un intento, desde la capacidad de conocimiento que le ha dado trabajar directamente en el Tribunal Internacional de La Haya, para intentar aproximarse a una pregunta que no he visto plantearse directamente a la Ciencia Política, ni al análisis en causas y efectos de conflicto, quizás a la psiquiatria, quizás a la psicología…no sé, da demasiado miedo. ¿¿Cómo es posible que exista gente, y no pocos, como Rodovan Karadzic?? ¿Que lleva a mobilizaciones, guerras y exterminios sustentados en argumentos como «los musulmanes de bósnia son un defecto genético infiltrados en cuerpos Serbios» o «los Kosovares son maleantes porque lo llevan en la sangre y deben ser borrados del mapa de Serbia?. Sólo son algunas de las cosas que se puedieron escuchar en discursos públicos. De boca de Milosevick y de Karadzic…transformados de mandatarios comunistas en Yugoslavia a fervores nacionalistas tras el derrumbe de la Unión Sovietica. Entre 1991 y 1995 en «Yugoslavia» murieron unas 200.000 personas ( la mayoría en Bosnia) y convirtió a 2.000.000 de personas en refugiados . El entonces presidente de la Croacia Serbia Karadzic y

el general serbio bosnio Ratko Mladic están acusados de la masacre de 8.000 musulmanes bosnios en Srebrenica y del asedio de 43 meses a Sarajevo, en el que murieron más de 11.000 personas por los bombardeos, los francotiradores, la malnutrición y las enfermedades.

Que haya sido detenido ahora no es casual. Era bien sabido que la detención de los máximos dirigentes y imputados por crímenes contra la humanidad en este conflicto no estaban escondidos. Al menos hasta el reciente cambio de gobierno. Simplemente las heridas han sido tan grandes y tan mal curadas que no eran detenibles por miedo a sublevaciones. Milosevic fue le primero, a Karadzic le ha tocado cuando a Serbia le urge integrarse en la Unión Europea y esta pide su entrega como condición indispensable. Muchos medios lo han dado a entender, pero no del todo. Pero sólo hay que pensar en como sería posible que un ex-presidente de un país ( SIEMPRE rodeado de las fuerzas de seguridad a o b) se les despiste en una de esas que va al baño y se quede en el país….ah clarooo…¡¡¡ la policía es tonta !!!…

En todo caso, nos alegramos en la ratonera que por fin este sentado…en un banquillo. Y esperamos la detención de Mladic, ya que están puestos.